Javier Flores
La actual crisis ecológica de escala mundial y el colapso medioambiental, le han llevado en la última década a desarrollar varias líneas de trabajo en torno al compromiso con la naturaleza. Ésta en concreto reflexiona sobre las nervaduras, la decrepitud de unas formas de origen vegetal como hojas y fibras; filamentosas, desmadejadas, aquello que resta tras la muerte de los seres que estuvieron vivos mientras que se transforman en humus. En definitiva, una evocación de cuanto es delicado, sutil y efímero. Piezas todas ellas realizadas mediante tecnologías digitales aplicadas al corte láser, soldadas mediante la innovadora técnica TIG y aplicando diferentes terminaciones (pavonadas y pulidas) para finalmente instalarlas sobre la pared a la manera de un dibujo en el aire.